Por tercer año consecutivo, atletismo y solidaridad se dieron la mano en la Legua Industrial a beneficio de Unicef, organizada por el Club de Atletismo Joaquín Blume con la colaboración de la Asociación de Empresarios del Polígono Industrial y del Ayuntamiento de Valverde del Majano, bien apoyados por los voluntarios y con el imprescindible trabajo de los jueces del Comité Autonómico.
Esta competición que se celebra a mediados del mes de septiembre se ha convertido en un acontecimiento deportivo/familiar de obligado cumplimiento para padres e hijos, que desde primera hora de la mañana se acercaron hasta la línea de salida, bien para participar en las primeras carreras en el caso de los chupetines, bien para aplaudir a los más jóvenes, que no conocen eso de dosificarse. Salieron como balas y terminaron... cansados, como todos.
Con el ánimo de fomentar cada vez más la participación popular, la organización optó por acortar el recorrido, dejándolo en 4.500 metros que aún se les hicieron duros a no pocos de los corredores que quisieron pasar una deportiva, y no excesivamente calurosa, mañana de domingo.
Dentro del apartado estrictamente competitivo, los dos mejores atletas segovianos de la actualidad, Javier Guerra y Helena Herrero, no tuvieron mayores dificultades para imponerse en la línea de meta en sus respectivas categorías. Después de sólo dos semanas de vacaciones, Javi Guerra prepara ya la temporada de cross con la vista puesta en el campeonato continental, mientras que Helena Herrero celebró su victoria en el campeonato de España de triatlón cross ganando en la Legua Industrial.
Pero para ganadores de verdad, los Hermanos de la Cruz Blanca, que como en ediciones anteriores tuvieron la oportunidad de disputar una carrera en la que se llevaron los mayores aplausos. Tampoco se pueden escatimar elogios para los amigos de Unicef, con su presidente Antonio Postigo a la cabeza, saben poner su mejor cara al mal tiempo de la crisis económica. Pocos mejor que ellos saben de las necesidades de dinero. (J. M, / El Adelantado)
Esta competición que se celebra a mediados del mes de septiembre se ha convertido en un acontecimiento deportivo/familiar de obligado cumplimiento para padres e hijos, que desde primera hora de la mañana se acercaron hasta la línea de salida, bien para participar en las primeras carreras en el caso de los chupetines, bien para aplaudir a los más jóvenes, que no conocen eso de dosificarse. Salieron como balas y terminaron... cansados, como todos.
Con el ánimo de fomentar cada vez más la participación popular, la organización optó por acortar el recorrido, dejándolo en 4.500 metros que aún se les hicieron duros a no pocos de los corredores que quisieron pasar una deportiva, y no excesivamente calurosa, mañana de domingo.
Dentro del apartado estrictamente competitivo, los dos mejores atletas segovianos de la actualidad, Javier Guerra y Helena Herrero, no tuvieron mayores dificultades para imponerse en la línea de meta en sus respectivas categorías. Después de sólo dos semanas de vacaciones, Javi Guerra prepara ya la temporada de cross con la vista puesta en el campeonato continental, mientras que Helena Herrero celebró su victoria en el campeonato de España de triatlón cross ganando en la Legua Industrial.
Pero para ganadores de verdad, los Hermanos de la Cruz Blanca, que como en ediciones anteriores tuvieron la oportunidad de disputar una carrera en la que se llevaron los mayores aplausos. Tampoco se pueden escatimar elogios para los amigos de Unicef, con su presidente Antonio Postigo a la cabeza, saben poner su mejor cara al mal tiempo de la crisis económica. Pocos mejor que ellos saben de las necesidades de dinero. (J. M, / El Adelantado)
