(2012-06-17).- Los valverdanos mostraron ayer su devoción a su patrona, la Virgen de la Aparecida, con su participación masiva en la romería que se desarrolló en el entorno de la ermita. Se trata del acto central de las fiestas que se celebran desde el viernes pasado.
Con una ermita que volvió a llenarse por completo, el párroco, Felipe Sanz Pérez, ofició la novena, tras la cual se procedió a la subasta de los seis cordones con que está adornada la carroza en la que se traslada la imagen de la Virgen.
Los mejores postores fueron los encargados de sacar la imagen del templo. En el recorrido fue acompañada de numerosos danzantes y de los propios valverdanos que aprovechan para mostrar su fervor bailando jotas ante la patrona, al son de la música de dulzainas y tamboril.
Custodiada el párroco y por los miembros de la Corporación, que encabezaba el alcalde Rafael Casado, la comitiva dio dos vueltas por las inmediaciones del templo. Los padres aprovechan el recorrido para posar a sus pequeños en la carroza y ganar así la protección de la patrona.
La romería concluyó con la subasta para subir la Virgen al altar, y posteriormente, al trono, paso que como viene siendo habitual conlleva la principal puja.
La tarde finalizó con un refresco ofrecido por el Ayuntamiento a todos los asistentes, para continuar por la noche con una verbena en la Plaza Mayor.
La fiesta había comenzado el día anterior viernes, en que la prueba ciclista paralímpica llenó el pueblo de colorido y de representantes de varios países. Continuó por la tarde con el desfile de peñas y carrozas, y con el nombramiento de la reina y las damas de honor. A continuación la peña ‘Aquello’ fue la encargada de pronunciar el pregón inaugural.