(2012-08-17).- Las fiestas patronales en honor a la Virgen de la Asunción y San Roque concluyeron con un alto nivel de participación y un gran éxito en el desarrollo de las actividades programadas.

La entrega de premios a los ganadores de diferentes modalidades deportivas y de concursos de gastronomía puso fin al ciclo festivo con una ceremonia a la que acudieron todos los vecinos del pueblo y donde el alcalde, Rafael Casado, repasó lo más destacado de la programación.

A los dos últimos días de festejos se suman los dedicados a la Semana Cultural en la que no han faltado las actividades para los más pequeños. Destacado protagonismo ha tenido la comunidad maorí de Nueva Zelanda, que ha mostrado sus danzas y música, así como sus expresiones artísticas con tallas, tatuajes y pinturas tribales.

Este mismo día, última jornada de fiesta, fueron más de 600 las personas que se reunieron en la tradicional comida popular en la que se reúnen los vecinos el día de San Roque para compartir un rato al aire libre. La tradición de juntarse a comer comenzó de la mano de la peña La Aparecida, que preparaba una comida para los hombres asociados. Eran los tiempos en que la peña preparaba el grueso de los actos de las fiestas patronales, pero que progresisamente fueron pasando al Ayuntamiento. Con el paso del tiempo, el Ayuntamiento abrió la posibilidad de que las mujeres también participaran y organizó una paellada en la que se permite también que degusten quienes no pertenecen a la peña La Aparecida. De este modo, la Plaza Mayor y algunas calles próximas se llenaron de mesas y sillas aprovechando el buen tiempo reinante. Reunidos por grupos de amigos, todo el pueblo pudo comer junto. Al término de la comida, la peña La Aparecida sometió a votación a mano alzada modificar sus estatutos, pero se decidió continuar como hasta ahora; así como cambiar de directiva el próximo año.

Se trataba de la última de las multitudinarias citas gastronómicas de estos días de las fiestas patronales y de la Semana Cultural. En días anteriores también han sido varios centenares de bocadillos, raciones de chorizo con huevos frito, o de sopas de ajo, que se han distribuido entre los vecinos gracias a la colaboración de las peñas del pueblo. De acuerdo con los datos ofrecidos, se repartieron en cada jornada en torno a 700 raciones o más incluso.

El buen tiempo ha reinado en todos los días de la celebración, salvo uno en el que una tormenta marcó la jornada, pero no fue preciso suspender ninguna actividad.